Diseñando belleza
Mi estilo de trabajo ha sido siempre lineal en un propósito: personalizado y único para cada clienta. Sin dejar de lado las tendencias estéticas del momento, nunca he aplicado patrones, aportando a cada clienta esas pinceladas que la hagan sentir más guapa pero sin perder su identidad. Que todos lo noten pero que nadie lo vea. Y que cuando se mire al espejo vea tan sólo su mejor versión.
“Justo lo que todas mis clientas desean: que se note pero que no se note… ¡esa famosa frase!”
Con la micropigmentación podemos recuperar esas cejas perdidas o desestructuradas, la expresión y vivacidad de los ojos y la sensualidad de los labios.
No es un tratamiento indeleble, de por vida. Pero si duradero. Su duración está calculada para ir adaptándonos a los cambios morfológicos de nuestro rostro y a los gustos propios en cada etapa de la vida. Considero que la micropigmentación no tiene edad, tan solo hay que adaptarla a cada caso. Durante mi larga trayectoria he tratado desde jóvenes de 18 años hasta nonagenarias bien presumidas!
La micropigmentación como arte
La micropigmentación es considerada por muchos como un arte. No cabe duda que un buen profesional ha de tener criterio estético, cualidades artísticas, gran conocimiento del rostro en su integridad y mucho sentido común. Es por eso que apuesto por una micropigmentación responsable.
¿Esto qué significa?
- No dejarse llevar por las modas al extremo.
- No querer sustituir el maquillaje convencional por la micropigmentación. Ésta es un complemento que a veces puede ser más que suficiente por sí misma, pero no para quien guste de maquillajes más arriesgados.
- Elegir a un profesional experimentado que se adapte a tus gustos y dejarte aconsejar.
- Quererse mucho a una misma y no poner tu rostro en manos de oportunistas. Cuestionarse gangas y ofertas y valorar la experiencia, la inversión en formación y equipación de los especialistas con quienes te trates.
“A veces no hacen falta grandes cambios sino buenos cambios”
Pinceladas
de autoestima
Una mención aparte son los logros conseguidos en el tatuaje reconstructivo y de camuflaje. Tiene su mayor expresión en la reconstrucción total de areola tras mastectomía. Aplicando los principios del dibujo artístico y realista, buscando la tridimensionalidad y la naturalidad, podemos ayudar a esas mujeres valientes a recuperar autoestima.
También tiene aplicación en cicatrices periareolares postcirugía. En repoblación óptica capilar en calvas e implantes capilares.
Un diseño a tu medida
Si crees que puedo ayudarte con mi trabajo, no dudes en consultarme.